Reflexiones Interiores

Conciencia
Como resolución de Año Nuevo, este 2013, me propuse desarrollar mayor Conciencia personal, para aprender a Amar. El reflexionar sobre las lecciones de cada día, me permitirá desarrollar mayor auto-conocimiento.... Es una nueva oportunidad de re-comenzar y re-inventarse, día a día.
Lo decidí al escuchar la radio y la televisión que promovían la renovación de hitos y metas este Año Nuevo. Al principio me resistí, porque año con año, me propongo: regímenes de salud; mejoras en mis relaciones; y reparación de daño, sin éxito. Invariablemente termino fracasando. Algo pasa. No quiero seguir repitiendo el mismo proceso de desilusión, limitándome a metas pre-establecidas, que constriñen mis logros, a lo que ‘conozco’. Es imposible ‘cambiar’ si sigo imponiéndome metas, donde solo trato de controlar las variables de resultados ‘conocidos’. El reto está en abrirse a lo ‘desconocido’. Ello requiere desarrollar conciencia y arriesgarse con valor y confianza. Solo así lograré ampliar mi alcance personal y abrirme a las oportunidades y bendiciones que me rodean, cada día. El seguir estableciendo una agenda personal de metas y alcances conocidos, me impide responder con re-novada creatividad e innovar mis relaciones con los demás, o alinearme en sincronía, con el ‘aquí y ahora’.
Por ello, este Año Nuevo, mi regalo personal es proponerme abrir a las oportunidades ‘otorgadas’ y ‘recibir’ lo inesperado, día a día, momento a momento, en el aquí y ahora.

Con esta nueva resolución me encontraba caminando en la playa, el último día de 2012 cuando acabé por participar, inesperadamente, en una ceremonia de ‘vida’ con un grupo de ecologistas quienes lanzabas pequeñas tortugas al mar. ¡Qué atardecer! Con renovada conciencia, empecé a tomar fotografías descubriendo un nuevo enfoque. Despertaba en mí un nuevo asombro que daba significado a mi alrededor: un castillo de arena con banderas que ondeaban, de seguro, mis deseos de paz en la tierra.